R-Lar
La pandemia de COVID-19 inauguró un cambio radical en la forma en la que nos comunicamos. La incorporación de la videoconferencia se acopló a nuestra cotidianeidad con la fuerza que la urgencia y la necesidad nos impuso a tod·s. ¿Pero alguna vez nos preguntamos por qué los programas nos devuelven, además de la imagen de ·l· otr·, también nuestra propia imagen? ¿Por qué necesitaríamos vernos para hablar con alguien si esto no ocurre cuando hablamos frente a frente, cara a cara?
Nuestra imagen en pantalla es, de por sí, una imagen transformada, y supone una puesta en escena: poner el cuerpo es, en definitiva, una performance por parte de quien se ubica frente a la cámara pero además un registro constante que propone un modo adecuado de estar frente a la pantalla.
R- lar propone una lectura crítica de la forma casi automática en la que hemos permitido, casi sin darnos cuenta, ser sumergidos en una relación de autodisciplinamiento y exacerbación de nuestras tendencias narcisistas frente a la cámara y la pantalla.
La Instalación
La instalación consiste en un rostro de maniquí, con una máscara hecha con materiales orgánicos que está enfrentada a una pantalla de computadora. Del otro lado de la instalación se ubican ·l· visitante, también enfrentad· a una pantalla de computadora. En las pantallas se ven las imágenes de la teleconferencia.
A medida que pasa el tiempo, en la cara del maniquí comienzan a aparecer las imágenes de quienes han pasado antes por la instalación, hasta que, eventualmente, aparece la imagen en vivo de la persona que está interactuando. Por otro lado, en los parlantes se escucha una reinterpretación con una red neuronal de lenguaje natural de «Alicia a través del espejo», de Louis Carrol y «Los robots del amanecer», de Isaac Asimov.
La máscara que usa el maniquí fue modelada por Guillermina Perot Mac Donald, utilizando materiales orgánicos.
Exhibida en el Centro Cultural de las Ciencias durante la Noche de los Museos 2022.
Esta obra fue realizada con una beca del Fondo Nacional de las Artes y dentro del proyecto Percepciones y Anticipaciones en la Escena del Arte del Laboratorio de Acústica y Percepción Sonora (LAPSo) de la Universidad Nacional de Quilmes
